Durante unas horas los empleados de Facebook y Google sufrieron una verdadera pesadilla: las aplicaciones internas de estas empresas ya no funcionaban en los iPhone de esos empleados porque Apple había revocado los certificados que lo permitían. La razón: habían violado los términos de uso del programa para empresas de Apple.
El susto ha pasado ya y Apple ha restaurado los certificados de esas apps internas tanto a Google como a Facebook, pero el bloqueo de dichas aplicaciones ha demostrado el poder que tiene Apple sobre uno de los procesos más relevantes de estas empresas: el de desarrollo y pruebas que ejecutan a nivel interno antes de distribuir esas versiones de sus aplicaciones de forma pública.
El pasado miércoles Techcrunch revelaba cómo desde 2016 la empresa de Mark Zuckerberg había pagado a personas de entre 13 y 35 años 20 dólares al mes (afiliados aparte) por instalar la aplicación "Facebook Research".
Dicha aplicación le permitía a Facebook recolectar el historial de navegación del usuario, qué aplicaciones tenía instaladas, cómo las usaba y hasta era posible descifrar el tráfico cifrado. Lo hacía a través de una VPN muy especial, algo que Facebook ya había hecho en el pasado y que de nuevo violaba los términos del llamado Developer Eterprise Program de Apple.
Este programa permite que las empresas puedan distribuir a sus empleados diversas aplicaciones para iOS de forma interna y con unas condiciones muy especiales. Como explicaban nuestros compañeros de Applesfera,
Este tipo de certificado está pensado para que las empresas puedan desarrollar sus propias aplicaciones de uso interno y no tengan que pasar por el App Store ni por ninguna revisión de Apple. Es una forma de facilitar los desarrollos llamados in-house. Un tipo de certificado que en sus normas dicen taxativamente que solo puede ser usado para instalar apps en dispositivos de flotas de empresa o de empleados de la misma.
Ese descubrimiento provocó la reacción inmediata de Apple, que bloqueó la ejecución de estas aplicaciones. Los empleados de Facebook se encontraron de repente con que todas esas herramientas internas habían dejado de funcionar. Como explicaban en Apple,
Diseñamos nuestro Developer Enterprise Program exclusivamente para la distribución interna de aplicaciones dentro de una organización. Facebook ha estado utilizando su membresía para distribuir una aplicación de recopilación de datos a los consumidores, lo que constituye un claro incumplimiento de su acuerdo con Apple. A cualquier desarrollador que utilice sus certificados empresariales para distribuir aplicaciones a los consumidores se le revocarán sus certificados, que es lo que hicimos en este caso para proteger a nuestros usuarios y sus datos.
Lo mismo ocurriría con Google a las pocas horas. La empresa también había aprovechado ese tipo de plataforma interna de forma indebida, lo que provocó que también fueran revocados los certificados de esas aplicaciones, que dejaron de funcionar dejando a estos usuarios en muchos problemas. Google pronto comunicó que estaba trabajando con Apple para resolver el problema.
El programa para desarrollos empresariales de Apple permite a las empresas algo muy importante: evaluar el comportamiento de versiones preliminares de sus aplicaciones antes de lanzarlas al público.
Es el célebre "dogfooding" que define ese proceso de pruebas interno que convierte a los empleados en algo así como beta-testers. Cancelar el acceso a a esas aplicaciones hace que de repente el trabajo de desarrollo quede paralizado porque todos los implicados en esa aplicación ya no pueden probar si los cambios que están realizando funcionan como esperaban o no.
El problema va de hecho más allá. Además de esas aplicaciones internas que son versiones preliminares de sus herramientas públicas, tanto Google como Facebook tienen aplicaciones propias solo para empleados. Con ellas su personal puede por ejemplo trasladarse en los medios de transporte de sus campus empresariales o pagar la comida en la infraestructura propia de estas empresas, por ejemplo.
Tanto Facebook como Google han logrado restaurar esos certificados gracias a su colaboración con Apple. En Facebook explicaban hace unas horas cómo "hemos logrado que se restaure nuestra Certificación de Empresa, lo que nos permite utilizar nuestras aplicaciones internas para empleados. Estamos trabajando para hacer que nuestras aplicaciones internas vuelvan a activarse funcionar".
Googlers now have their ios apps back btw, all is well with the world. #
— Mark Bergen (@mhbergen) 1 de febrero de 2019
En ese mismo comunicado](# "") a la CNBC portavoces de la empresa aclaraban además que "para ser claros, esto no ha tenido ningún impacto en los servicios de cara al usuario".
Lo mismo ocurría hace unas horas con Google. Uno de los portavoces de la empresa indicaba que "sus aplicaciones corporativas internas habían sido restauradas", lo que confirmaba que ambas empresas habían cumplido con los requisitos del programa de Apple en este sentido.
The Verge out with another really bad take.
— Neil Cybart (@neilcybart) 31 de enero de 2019
Summary of article: Apple is a monopoly and the way they care about user privacy should worry and scare you. # pic.twitter.com/d3btzxzBki
Todo vuelve a la normalidad, aunque estos sucesos han detonado el debate sobre la dependencia que incluso gigantes como Facebook o Google tienen de Apple. En Axios hablaban de cómo "los gigantes tecnológicos son los nuevos guardianes de la puerta" mientras que en The Verge iban más allá hablando de cómo el poder de Apple sobre Facebook debería preocuparnos.
El debate estuvo servido desde el primer momento: y aunque Apple actuó según los términos de uso de su programa, algunos (como la Electronic Frontier Foundation) creen que el poder que ha ejercido sobre Facebook o Google demuestra la influencia que tienen estas empresas en procesos que pueden dejar paralizado a cualquier negocio. Incluido el de otros giganes como Facebook y Google.
.
Fecha: 01-02-19
Categoría: Apps/Software
Leer Más
Todas las noticias